Capacitaron sobre el arbolado como base urbana, cuándo y cómo corresponde la poda. El curso estuvo a cargo del Ing. Tenaglia, asesor del Plan de Arbolado Urbano que implementa la Municipalidad.
Mientras se desarrolla el Plan de Arbolado Urbano, el asesor de tal Plan, ingeniero Marcelo Tenaglia, brindó en dos jornadas una capacitación destinada a empresas vinculadas directa o indirectamente a la poda, de la que también participó personal municipal.
El objetivo fue aprender con más profundidad sobre el proceso fisiológico de los árboles al momento de cuidarlos, y qué tipo de mantenimiento corresponde en cada caso. La capacitación se realizó de manera teórica y práctica, incluyendo trabajo de calle viendo casos concretos del arbolado urbano.
Tenaglia expresó que «El árbol es un patrimonio de la ciudad, es un ser vivo y es un servicio público, y como tal debe ser considerado con tanta importancia como la tiene el gas o el alumbrado. Debe ser tratado de la misma manera con que se trata a cada elemento que brinda servicio a la ciudad».
¿Cuándo podar y cuándo no?
Quizás contrariamente a lo que se cree de manera popular, es clave «no intervenir el árbol con podas a menos de que sea estrictamente necesario. En ese caso, hablamos de qué tipo de podas puede soportar un árbol. «Troncharlo» o cortarlo a cierta altura todo por igual, no lo ayuda, sino que lo termina deteriorando, se pudre y muere. Por eso hablamos de que estas podas de mantenimiento deben ser las mínimas indispensables, y hay formas de hacerlo de manera coherente con las necesidades del servicio público que estamos queriendo despejar, como por ejemplo, los cables de alumbrado», detalló Tenaglia.
Durante el curso también se habló sobre situaciones que atraviesan las raíces y el objetivo de evitar que ello termine en la extracción de un árbol, lo cual corresponde sólo en casos muy extremos, casi nunca es necesario, según las explicaciones técnicas del ingeniero.