El 25 de mayo de 2015, Jorge López fue detenido por efectivos de la Comisaría Segunda, en el marco de un episodio confuso. El hombre trabaja en un servicio de seguridad y en ese entonces tenía 48 años. En los últimos cuatro meses la causa fue aplazada tres veces.
La policía realizaba un procedimiento tratando de llevar detenidas a algunas jóvenes que se resistían al arresto. López filmó las acciones y eso despertó en los uniformados, agentes, oficiales y hasta un médico policial, una reacción a la cual los familiares de la víctima consideraron abusiva.
“Estuvo dos días preso”, contó a La Prensa Federal su padre, Carlos López. “Lo golpearon hasta lastimarlo y luego lo bañaron con una hidrolavadora. Era pleno invierno”. Según su padre, eso le provocó lesiones síquicas que todavía arrastra. “Está muerto en vida -dijo- le destrozaron la familia y también a nosotros. Tiene una hija de 9 años que ve el sufrimiento de sus padres ante un hecho que resulta incomprensible”.
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