En 2021 se duplicaron los ataques de ciberdelincuentes en Argentina


Según datos de la Dirección Nacional de Ciberseguridad, durante el año pasado, de los 591 incidentes reportados, «el 79,02% fueron de severidad alta; el 11,68% fueron severidad media; 6,60% de severidad baja y 2,71% de severidad crítica».
Los incidentes de inseguridad informática en la Argentina se duplicaron respecto al año 2020, según los datos registrados por el equipo de respuesta a emergencias informáticas (Cert.ar) dependiente de la Dirección Nacional de Ciberseguridad.
No obstante, el director nacional de Ciberseguridad, Gustavo Sain, dijo que «si uno toma como referencia los ataques, la Argentina no ha sufrido ataques de relevancia».
Según el reporte del año 2021, al que tuvo acceso Télam, «en el año 2020 la cantidad de incidentes reportados fue de 226», mientras que «en el año 2021, fueron 591»; y de ellos el 55,24% corresponden a casos de phising (robo de identidad), seguido por la modificación no autorizada de la información (15,20%) y por el spam, en cerca del 10%.
«El ransomware, la gran preocupación en los foros y ámbitos especializados se hizo presente en la comunidad objetivo de CERT.ar mediante sus diferentes tipos y variantes (Sodinokibi, Avaddon, Clop, DarkRadiation, LockBit, OnePercent, Everest, Cuba), generando diferentes niveles de impacto», cita el informe.
El ransomware es un tipo de malware que impide a los usuarios acceder a su sistema o a sus archivos personales y que exige el pago de un rescate para poder acceder de nuevo a ellos.
Según los cuatro niveles de severidad que establece el organismo (bajo, medio, alto y crítico), durante el 2021, «el 79,02% fueron de severidad alta; el 11,68% fueron severidad media; 6,60% de severidad baja y 2,71% de severidad crítica».
Sain remarcó que «las condiciones de seguridad de internet están establecidas por las empresas proveedoras de los servicios, que en su mayoría tiene los servidores fuera del país».
Según el informe, el 39,7% de los incidentes reportados fueron sobre sitios del Estado; seguido por el sector finanzas (26,13%) y el de Tecnologías de la información y las comunicaciones (Tics) con 21,11%.