La nueva cara de la peatonal exige también más controles

La peatonal Luz y Color fue reinaugurada en septiembre de 2011, en el marco de un acto que convocó a muchos vecinos y tres dirigentes que hoy continúan en el candelero: el intendente, Marcelo Bisogni, el vicegobernador, José Lauritto y el Senador Carlos Schepens.

En la oportunidad el Presidente de la Comisión Amigos de la Peatonal, Rodolfo Vénere, agradeció a las autoridades y el público presentes. “Primero quiero recordar a todos los comerciantes que hace 25 años tuvieron la iniciativa de que Concepción del Uruguay tuviera una calle peatonal. Nosotros nos sentimos simplemente sucesores de esa Comisión y queremos agradecer a todos los que participaron de una manera u otra de este proyecto.

Quiero destacar la labor del arquitecto Arturo Mardon, de la empresa COPUL – que también construyó la primera peatonal -, empresa que sin inconvenientes trabajó aún con los comercios funcionando; también el importante subsidio de parte de la provincia, la colaboración permanente del municipio, tanto del Ejecutivo como del Legislativo, a todos los miembros de la Comisión, a los comerciantes y al público que hoy nos acompaña y que la disfrutemos por muchos años”.

Lamentablemente, la aspiración de Vénere no pudo concretarse y hace unos meses fue necesario insistir ante la comuna por el estado del paseo comercial. En las últimas horas el Ejecutivo tomó la decisión de comenzar la primera etapa de una serie de trabajos, entre los cuales se contempla la pintura de bancos, papeleros y farolas de las cinco cuadras.

La segunda incluirá mejoras en la iluminación, arreglo del solado y renovación de los carteles nomencladores, que parecen haber sufrido un deterioro más acelerado que el resto de los  componentes del paseo. La razón es muy simple: están confeccionados en MDF o fibrofácil, un material expresamente contraindicado para utilizar en exteriores.

Ello trae a consideración la necesidad de poner en práctica controles más estrictos sobre la obra pública, especialmente en casos como éste, donde una parte de los fondos proviene de colectas a vecinos del lugar, comerciantes y empresas. Se entiende que sólo la comuna ostenta la potestad de ese control, pero podría aprovecharse el importante involucramiento de los integrantes de la Comisión de Amigos de la Peatonal, para que revisen los cómputos de materiales con que se realizarán los trabajos, ya que la presencia de arquitectos y empresas reconocidas en el proyecto, parecen no asegurar nada.