Más de 80 cámaras instaladas para video vigilancia en ciudad

El sistema de video vigilancia en la ciudad viene cumpliendo su objetivo, con 82 cámaras y 24 puntos monitoreados, aunque hoy la realidad exige profundizar algunas de sus principales ventajas. El municipio avanza en más puntos de monitoreo y la incorporación de nuevas tecnologías, necesarias para realizar un control en tiempo real más efectivo.

La seguridad es uno de los pilares que garantizan el buen funcionamiento de la sociedad. Es, además, una de las principales demandas que surgen a la hora de consultar a los vecinos sobre los temas de preocupación. Es una realidad que no escapa: desde los barrios de Concepción del Uruguay, hasta los rincones del conurbano bonaerense. 

Una de las medidas que viene dando buenos resultados en la ciudad en los últimos 5 años y en forma sostenida, es la colocación de cámaras de vigilancia. Si bien los resultados se dan mayoritariamente en la resolución de hechos delictivos (identificación de delincuentes, vehículos y aportes de pruebas para la Justicia), también tienen un efecto positivo en la prevención. Para mejorar en este punto, debería ser más efectivo el monitoreo “en tiempo real”, para lo que se requiere mayor equipamiento, monitores y más personal para el control permanente de 82 cámaras que hay dispuestas en 24 distintos puntos de la ciudad.

Sin dudas, la incorporación de cámaras de video en diferentes puntos de la ciudad,  cuyas imágenes pueden monitorearse desde una sala especial de la Jefatura Departamental de la Policía, sumó un complemento de importancia a la estrategia que el Estado desarrolla en materia de seguridad pública. La comuna uruguayense ha puesto en funcionamiento casi un centenar de equipos con esta característica, distribuidos en 24 puntos estratégicos elegidos en consonancia con la premisa de trabajar en la prevención de delitos. 

El monitoreo se realiza en tiempo real, con diferente número de cámaras en cada punto, según las condiciones geográficas del lugar y la logística propia que obliga esa singularidad. Desde la Departamental de Policía, se conformaron distintos equipos especializados que reciben la información y establecen protocolos de acción. A lo largo del tiempo el sistema permite analizar secuencias y características de las acciones, prevenir delitos y aportar pruebas ante la justicia. Para hacerlo posible, las imágenes deben ser lo suficientemente claras para que al acercar la imagen lo suficiente, pueda identificar rostros y leer patentes.

Se trata de inversiones elevadas (más de 4 millones de pesos hasta la última licitación en 2019), pero ha sido positiva la colocación de más equipos, ya que cuando se habla de acciones, no se tiene en cuenta sólo las de orden delictivo, sino que una mayor cobertura de imágenes de calidad adecuada, podría colaborar mucho en materia de accidentes y controles de tránsito, entre ellos, los de velocidad.

Post-pandemia

Con el panorama descripto, el Departamento Ejecutivo Municipal, dispuso a través de la Secretaría de Gobierno algunas acciones tendientes a continuar el trabajo en la prevención de la seguridad ciudadana:  continuar el trabajo conjunto con el Ministerio de Gobierno de la Provincia; dialogar con la Departamental de Policía para establecer nuevos puntos de monitorio en la ciudad; coordinar acciones para perfeccionar el plantel humano que sigue de cerca las imágenes las 24 horas y esencialmente, establecer un presupuesto para lo que resta de este año e incorporar no solo más cámaras, sino además, nuevos mecanismos tecnológicos de control.

Concepción del Uruguay ya recorrió una buena parte de este camino y se entiende que tanto la comuna local como las autoridades provinciales, mantienen su preocupación en este sentido. La salida de la pandemia parece agregar mayor inseguridad en algunos de los principales distritos del país; es probable que la ciudad necesite sumar entonces más recursos para su tranquilidad, poniendo el foco en la prevención, como se ha venido haciendo desde la puesta en marcha de las cámaras de vigilancia, con monitoreo en tiempo real, pero también compartido.

Los nuevos problemas traen consigo la exigencia de una solución particular. A la par, la instalación de los sistemas de vigilancia por video, como suele ocurrir con los avances tecnológicos en general, reducen su precio lo que permite hoy a cualquier vecino tener una cámara en el frente de su domicilio. Es decir que socialmente el sistema de seguridad por video ha sido convalidado, lo que supone no sólo la colaboración ciudadana en la materia, sino que además permite al Estado compartir su objetivo de brindar seguridad no sólo con la fuerza policial.