Un alfajor producido en Entre Ríos fue premiado en el Mundial de Buenos Aires

Para divertirse durante la cuarentena de 2020, comenzó a hacer alfajores mientras jugaba junto a sus hijos. Este fin de semana, la emprendedora entrerriana, fue premiada en el Campeonato Mundial del Alfajor por uno de sus productos.

«Todo el esfuerzo que hice valió la pena», afirmó hace pocos días, Andreína Tommasi. En 2020, junto con sus hijos Dante y Bella, comenzaron a hacer alfajores mientras jugaban en la cocina de su casa de Concordia, para divertirse durante la cuarentena.

En una de las tantas tardes de recreación, un error de cálculo en la receta hizo que preparen más de la cuenta y, por ese motivo, tomaron la decisión de vender los restantes a los vecinos. Aquella idea espontánea generó una popularidad que no esperaban y esta semana, participaron del Campeonato Mundial del Alfajor, donde un jurado, cató a ciegas, los distintos productos y elige el mejor en varias categorías.

“La Maga Alfajores” se consolidó en el mercado tras sus primeros pasos en 2020 y, sin embargo, este domingo, dieron a conocer que lograron un premio en el Mundial del Alfajor.
Andreína Tommasi, informó que lograron el premio como “Medalla de plata al mejor alfajor triple”, pudo saber Elonce. “Somos campeones mundiales. Qué emoción tan grande”, indicaron en las redes sociales.

Cómo se inició La Maga

“Estábamos recién mudados y yo atravesaba un momento bastante difícil. Como no podíamos ir a ningún lado, empezamos a hacer un juego con mis hijos, que consistía en elaborar alfajores. El mayor era el catador y nos decía qué ingrediente le faltaba para que sea cada vez más rico. Realizábamos una receta, lo comíamos, y a los días volvíamos a probar con otra”, contó Tommasi.

En la actualidad, prepara entre 400 y 500 alfajores por día y las ventas llegaron hasta Norteamérica. «Se gestó algo hermoso. Este espacio me salvó la vida. Imagináte que algo tan sencillo, que parecía ser un juego, se transformó en una pasión total, en un compromiso y en una salida laboral”, había contado Andreína.