Seis dirigentes de UPCN y el exministro de Salud, Ariel de la Rosa, serán juzgados del 22 al 25 de octubre en el marco de la causa por supuestos aprietes y amenazas contra la directora del hospital Colonia de Diamante, Noelia Trossero.
Al respecto, el secretario general del gremio, José Allende, aseguró que se encuentran «tranquilos» y lo calificó como «otro de los atropellos que se hizo al movimiento sindical».
Los dirigentes habían sido denunciados por la directora del hospital de Diamante por aprietes y amenazas para que reincorpore a la enfermera y delegada de UPCN, Yanina Migueles.
Fueron imputados por el supuesto delito de coacción agravada Zunilda Suárez; Fabián Monzón, secretario adjunto del gremio y uno de los siete directores del Instituto Obra Social de la Provincia de Entre Ríos (Iosper); los vocales suplentes en el sindicato, José Zarza y Guillermo Barreira; Carina Domínguez, secretaria gremial; y Noemí Ester Santamaría, vocal titular del gremio. A Barreira y Monzón también se les imputa el delito de desobediencia judicial y amenazas, ya que el día de la detención amenazaron a los policías que los detuvieron.
«Es otro de los atropellos que se hizo al movimiento sindical pero estamos tranquilos», dijo a APF, el titular de UPCN, a comienzos de mes. Y comparó lo sucedido con los hechos registrados en Villaguay, donde 14 dirigentes fueron a juicio por el mismo delito y resultaron sobreseídos por el Tribunal de Juicio y Apelaciones de Concepción del Uruguay.
«Creemos que en esto va a pasar exactamente igual, el despotismo de unos llega hasta ahí, la Justicia cuando tiene que definir, define en base a la justicia y ahí tenemos la razón nosotros», sostuvo Allende.