Queridos lectores, lamento decir que Juan Román Riquelme se equivoca, el hincha de Boca no quiere verlo a él y a Bianchi discutir con la prensa. El hincha de Boca quiere que se porten bien y que comiencen a jugar y a obtener resultados de acuerdo a la historia de Boca. La solución de todo es jugar bien al fútbol. Es cierto Bianchi ganó todo, nadie
Queridos lectores, lamento decir que Juan Román Riquelme se equivoca, el hincha de Boca no quiere verlo a él y a Bianchi discutir con la prensa. El hincha de Boca quiere que se porten bien y que comiencen a jugar y a obtener resultados de acuerdo a la historia de Boca. La solución de todo es jugar bien al fútbol. Es cierto Bianchi ganó todo, nadie lo discute, pero eso es el pasado y tomando este tipo de actitudes lo único que hace es ensuciar sus pergaminos de gloria. No se puede vivir del pasado y hay que tener la grandeza necesaria de ver la finalización de un ciclo sin tragedias, ni parodias. La solución es hacerse cargo de todo, no llorar, ni culpar a los demás.
Vivimos en un país donde los ganadores, son irrespetuosos, malignos y soberbios, creen que porque han triunfado en lo suyo tienen el derecho de atropellar a todo el mundo. Cuando Boca no juega en la cancha, habla afuera de ella y esto significa que las cosas están mal. Pero Boca no sabe hablar, por lo general , cuando toma la palabra es megalómano e insoportable y comete verdaderas barrabasadas. La reunión con periodistas de ayer (un monólogo de Riquelme, en verdad), lo demuestra claramente. Ni Bianchi, ni Riquelme quieren un diálogo. Saben que tienen muchos (demasiados) puntos flojos en sus rendimientos.
Culpar a los periodistas es no tener una actitud positiva y profesional. Decir que los periodistas “inventan tapas de diarios” es cierto; pero jamás se podrá culpar a la prensa de lo que cada jugador hace dentro de la cancha.
No hay líder, ni suficientes pergaminos que puedan engañar los ojos de todos. Boca juega mal, es un equipo sin jerarquía y sin juego. Y si mañana mejora, esa mejoría no invalida que hoy Boca esté donde se merece. ¿Es culpa de los periodistas? ¿Las infinitas lesiones de Riquelme, también son producto de los inventos de la prensa?
Si la prensa es tan nociva, ¿por qué los jugadores de Boca adoptan una actitud de ida y vuelta con muchos periodistas amigos? ¿Por qué abren la puerta del chisme, ventilan lo que sucede puertas adentro?
De a poco y de manera inexorable se acerca el fin del ciclo Riquelme-Bianchi, es hora de cambiar el aire. No cometo una blasfemia, ni quiero herir susceptibilidades, pero nada es para siempre. Todo tiene un comienzo glorioso (en este caso), un desarrollo muy positivo (también en este caso) y un fin, no tan exitoso, pero muy noble, por ahora. Hay que cuidar eso.
Tal vez, la llegada del Mellizo Schelotto sea una buena posibilidad para Boca. El hincha de Boca comete un error grave: piensa más en sus ídolos que en el club mismo. Y se encuentra ante una verdadera disyuntiva: Boca solo saldrá adelante, podrá tener futuro, despegándose de Riquelme y de Bianchi. La mejor forma que tiene el hincha de apoyar a sus ídolos y al plantel, es demostrarles que están equivocados y exigirles con que cumplan con su obligación de jugar bien.
Ya lo dije, hay que tener la grandeza necesaria, bajar el ego y el egoísmo y darse cuenta que el tiempo es lo único que no se recupera. Además, para terminar, la prensa no es el demonio, muchachos. Jueguen y ganen.