Jorge Ríos (70), el jubilado uruguayense de 70 años que mató a uno de los cinco ladrones que entraron en su casa en Quilmes (BsAs) y lo golpearon, rompió el silencio en canal América: “Me siento mal, no nací para matar a nadie”. Conmocionado, el hombre que cumple prisión domiciliaria por el hecho ocurrido en la localidad bonaerense de Quilmes afirmó: “Tampoco busqué que me entren tres veces en la noche… con qué intenciones quería venir esta gente, cinco personas”.

Jorge Ríos nació en Basavilbaso y de pequeño se mudaron a Concepción del Uruguay donde vivió toda su infancia y juventud hasta que ya mayor de edad se fue a Quilmes, donde formó su familia. Aquí en Concepción aún quedan familiares de Jorge que siguen el drama que atraviesa este jubilado del que todos los medios nacionales están hablando.
“Yo no soy un delincuente. No quise en ningún momento que esta gente, su familia, perdiera a esta persona. Mis condolencias totales, pero era mi vida”, continuó Ríos, al borde de las lágrimas.
El jubilado contó que fue amenazado con un destornillador y estuvo luchando “un rato largo”. “Tengo mi comadre acá al lado, de 80 años, y cuando se fueron pensé que la tomaban de rehén. Pensé mil cosas. Fue tan rápido todo que no sé. Sí, por supuesto, que tenía un destornillador que de tanto luchar pegó en un palo del parral. Fue todo tan fugaz que estoy tratando de ordenarme”.
El jubilado disparó contra Franco Moreyra (26) y lo mató de un tiro en pecho después de que entrara a robar tres veces a su casa. La Justicia lo acusa de “homicidio agravado” porque Moreyra ya estaba a 60 metros de su propiedad, herido en una pierna y sin poder escapar.
Para sus abogados seguía en peligro porque desde un auto blanco y negro los cómplices de “Piolo” Moreyra lo seguían amenazando.
Ríos había quedado detenido por homicidio simple, agravado por el uso de arma de fuego. Primero el fiscal Ariel Rivas (UFI N° 1 de Quilmes) lo imputó por legítima defensa privilegiada, que luego cambió a abuso de la legítima defensa y finalmente a una tercera carátula. Este lunes el juez de Garantías N° 2, Martín Nolfi, le otorgó el arresto domiciliario por sus problemas de salud.
Legítima defensa
“No se levantó con la intención de dañar a nadie y fue agredido por cinco delincuentes”, dijo ayer el ministro de Seguridad bonaerense Sergio Berni a Radio Cadena 3, al referirse al episodio que involucró a Ríos. El ministro reprochó el tratamiento judicial a estos casos, al sostener hay “una crisis de justicia muy importante que tiene que ver con liberar a los presos”.
“Cuando se libera a un delincuente se sabe lo que pasa. Hay un hartazgo en la sociedad por la inacción de la Justicia que ve que se cuidan los derechos de los delincuentes y no los de ellos”, manifestó Berni. En este sentido, consideró que “la Justicia es lerda y perezosa, que reacciona más a los comentarios de la vida mundana que a los principios de la justicia; por eso no funciona”.
“A cada acción le corresponde una reacción, y la acción deliberada de no impartir justicia está llevando a una reacción de la ciudadanía que no es buena y no es el camino al que debemos apuntar”, remarcó el titular de la cartera de Seguridad bonaerense. “El gran desafío es ver cómo lo reformamos y cómo hacemos que funcione el sistema judicial”, enfatizó.