Sociedad 15/09/13

LITURGIA 
 
Hoy, vigésimo cuarto domingo durante el año, se leen: el libro del Éxodo (32,7-11.13-14), donde se narra cómo, ante la súplica de Moisés, el Señor se aplacó y no hizo contra su pueblo el castigo que había prometido; una carta de San Pablo (1 Timoteo 1,1217) en la que el apóstol escribe:
 
«Jesucristo vino para salvar a los pecadores»; y el evangelio de San Lucas (15,1-32) donde se relata la parábola del hijo pródigo. 
 
SANTORAL 
 
Nuestra Señora de los Dolores. La celebración recuerda los dolores que sufrió la madre de Jesús, sobre todo en la Pasión y Muerte de su Hijo, dolores profetizados por el anciano Simeón, cuando en el templo de Jerusalén dijo a María que una espada le traspasaría el corazón.
 
La piedad popular representó a la Virgen Dolorosa con un corazón traspasado por siete espadas que simbolizan los dolores de María, y hasta hace poco, esta conmemoración se denominaba «Los siete dolores de la Virgen María».
 
El tema de los dolores de la Madre de Jesús fue, en el correr de los siglos, fuente de inspiración para el arte cristiano. Pinturas y esculturas, poesías y cánticos tienen como motivo los dolores de la Virgen. Entre ellos sobresale el himno «Stabat Mater», que inspiró a grandes maestros de la música.