Luego de una nueva asamblea de trabajadores frente al hospital Urquiza, empleados públicos de salud marcharon hacia el domicilio del ministro del área, Hugo Cettour, frente al cual manifestaron con cánticos y quema de papeles.
La cosa no pasó a mayores, pero la tensión generó una denuncia policial. Los estatales que se desempeñan en las áreas de Salud y Educación, de la administración y del Consejo del Niño, el Adolescente y la Familia (Copnaf) sostienen las asambleas con quite de colaboración, para exigir al gobierno una recomposición «que parta de los 5000 pesos», señalaron ayer en un parte de prensa. En la ciudad, en el marco de las asambleas permanentes, los trabajadores se manifestaron frente a la casa de los ministros de Salud y de Educación.
«Todo ocurre tras el acuerdo que firmaron los paritarios la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) y de la Unión Personal Civil de la Nación (Upcn) con el Gobierno, acta que fija un mínimo garantizado de 4300 pesos y una suba de un 26,4 por ciento para todo el año, por lo que la determinación fue sostener las asambleas con quite de colaboración, ya que la pauta salarial acordada es completamente insuficiente, no hay mejoras de las condiciones laborales, sumado al agravamiento que provoca no contar con un cronograma de pagos completo para todos los trabajadores», agrega el duro documento conocido en la tarde de ayer.
Desde ATE Uruguay amenazaron intensificar los reclamos «en la casa de los funcionarios quienes no escuchan y parecieran desconocer la realidad». Lo sucedido ayer en el domicilio de Cettour terminó con algunos incidentes inesperados, ya que el escrache llevó a pintadas con aerosol rojo en calle y vereda y a la quema de papeles y otros elementos, sobre la reja de acceso al domicilio del funcionario. La presencia policial en la zona hizo que los manifestantes se retiraran.