El actor defiende la película El juego de Ender que despertó críticas por su violencia y homofobia. Además, no descartó volver con Indiana Jones y ya una nueva Guerra de las Galaxias. Asegura que no teme a encasillarse y que cada historia le implica un desafío. 
Con 71 años, lejos de retirarse y más apuesto que nunca, Harrison Ford, vuelve a la pantalla grande con Ender’s Game, o, El Juego de Ender, la adaptación cinematográfica de la primera entrega de una saga literaria de ciencia ficción de Orson Scott Gard, un polémico autor rechazado por su conservadurismo y declarada homofobia.
La película, ambientada en 2070, trata sobre la amenaza de exterminio de la raza humana a manos de una agresiva especie alienígena conocida como los “insectores”. Andrew “Ender” Wiggin (Asa Butterfield, protagonista de El niño con pijama a rayas) es reclutado con tan sólo seis años para ser adiestrado en la Escuela de Batalla, una estación espacial donde, juntos a otros niños superdotados, bajo la estricta mirada del Coronel Hyrum Graff (Ford), para defender el planeta.
En el filme, que se estrena en España el 8 de noviembre y llegará a la Argentina próximamente, Ford, comparte el protagónico con otra veterana estrella del celuloide, Ben Kingley, oscarizado por Gandhi, en 1982, quien personifica al comandante de la Flota Internacional Mazer Rackham, un valiente héroe que logró resistir el primer ataque extraterrestre.
Ambos actores, junto al resto del equipo, compuesto por los jóvenes intérpretes Asa Butterfield y Hailee Steinfeld, de tan sólo 16 años (es una de las actrices más jóvenes nominadas al Oscar como mejor actriz de reparto en 2011, por su papel de Mattie Ross en True Grit); su director Gavin Hood (director y guionista de la película; obtuvo el premio Óscar a la mejor película extranjera en 2005, con su filme Tsotsi) y el productor Roberto Orci, pasaron por Madrid, para promocionar el filme.
“Me gustaría llegar a la audiencia con este filme”, dijo Ford, a quien los espectadores tienen identificado en su imaginario por sus protagónicos en Indiana Jones y Han Solo, en la Guerra de las Galaxias. “Sería como un regalo que la gente se compenetre con la historia”, dijo muy ilusionado, a la vez que se mostró “confiado” en que “la historia le gustará al público”, explico Ford, quien fue elegido por decisión de los productores del filme, aunque en principio, se habrían interesado por Viggo Mortensen, para el rol del Coronel Graff.
Con gran sencillez, y más de cincuenta años en la industria del cine, el actor aseguró que “cada proyecto” en que se inicia” representa “un nuevo reto” para él, que realiza “con ambición”, y que lo que le atrajo de su rol en El Juego de Ender, fue “el costado emocional de su personaje”. A la vez que dijo estar encantado de trabajar con el reparto conformado, en gran parte, por jóvenes actores nacidos en los años ´90, y que es la primera vez, que coincide con Kinsgley, a quien destacó como un gran profesional.
En relación a las críticas recibidas a raíz de las escenas de violencia de la cinta, Ford relativizó que “hay distintos tipos de historia y es de responsabilidad de la audiencia qué ver” y que, “El juego de Ender no supone, en absoluto, una película violenta en relación con muchas otras”. Sobre el mismo tema, Gavin Hood, el director del filme agregó que, “la intención no es destacar la violencia, sino mostrar cómo afecta y sensibiliza al personaje”.
Durante la grabación el director del filme, Hood, le sugirió a Ford que mantuviera una relación distante con el joven reparto de la película, para que esta distancia cobrara mayor realismo en la ficción.
Por su parte, el joven actor Asa Butterfield, de dieciséis años y protagonista de La Invención de Hugo, explicó que “fue un honor” trabajar con los consagrados Ford y Kingsley, a la vez que confesó que le gustaría “interpretar a James Bond” aunque reconoció que “para eso, tendré que esperar”.
Hailee Steinfeld, otra joven actriz, interpreta a Petra Arkanian, en El Juego de Ender, “es una de las estudiantes femeninas de la Escuela de Batalla que actúa como una hermana mayor para Ender Wiggin”, explica en Madrid. En La sombra del Hegemón, otro de los libros de la saga, se menciona que uno de sus profesores la encontró tan agresiva, que verificó su genoma para asegurarse de que no fuera un niño.
A su vez, el actor británico Ben Kingsley, expresó su satisfacción por formar parte del elenco junto a Ford, y confirmó que filmaría en breve en Almería, España, Exodus junto a Ridley Scott.
Harrison Ford, vuelve a insistir con el género de ficción, el mismo que lo catapultó a la fama a través de su personaje más legendario: Han Solo, en la saga de La guerra de las galaxias en 1.977. Aunque el actor dijo no sentirse encasillado por el género, dado que se trata de lo mismo: “contar una historia, independientemente del género”.
Por último, Ford, no descartó protagonizar una nueva entrega de Indiana Jones “podría ser”, dijo, a la vez que también estaría confirmado para una nueva edición de La guerra de las Galaxias, después de que en marzo pasado, Disney confirmara que se rodará una tercera trilogía.
La película se estrena en Estados Unidos y en España, en medio de manifestaciones contra el autor del libro, Orson Scott Card, quien también colaboró en el guion, por su manifiesto y ferviente rechazo a los derechos del colectivo homosexual.
Lo cierto, es que Harrison Ford, padre de cinco hijos, y casado recientemente en terceras nupcias en Nuevo México con Calista Flockhart, la protagonista de Ali McBeal, 23 años menor que él, luego de ocho años de noviazgo, parece decidido a reinventarse cada día y no dejar indiferente a sus seguidores, que por supuesto, no son pocos.
*Desde Madrid.