Gimnasia y Olimpo, con un cero enorme

Gimnasia y Olimpo, con un cero enorme

En un encuentro con escaso juego y poco peligro en los arcos, el Lobo platense no pudo de local ante el elenco de Bahía Blanca, que se fue algo más conforme. Pedro Troglio se retiró enojado.

Gimnasia y Olimpo, con un cero enorme

En un partido chato y sin emociones, pero con tensión y nerviosismo, sobre todo de parte del local, Gimnasia y Esgrima La Plata y Olimpo empataron 0-0 en el Bosque.

Los dos equipos tuvieron chances para anotar, pero desaprovecharon sus momentos y no pudieron romper la paridad.

El Lobo perdió al uruguayo Omar Pouso, quien se fue expulsado estando en el banco de suplentes por insultar al árbitro Néstor Pitana cuando había sido reemplazado por Dardo Miloc.

Por esa decisión, el director técnico Pedro Troglio estalló contra el juez mundialista al término del encuentro lo que provocó la intervención de efectivos policiales para separar a las partes.

El primer período fue muy trabado y a los dos le costó tomar el protagonismo y el control de la pelota. La primera chance de peligro fue para Olimpo, que lo tuvo con un cabezazo de Juan Ignacio Sills, pero el arquero Fernando Monetti sacó sobre su izquierda. Gimnasia contestó al minuto: el paraguayo Jorge Rojas llegó al fondo por la derecha, tiró el pase atrás y apareció el uruguayo Alvaro Fernández, quien enganchó y estrelló el disparo en el travesaño.

Después, a los 30, hubo un cabezazo frontal de Pouso, que controló bien Nereo Champagne, y después el guardavalla aurinegro volvió a trabajar a los 42 al tapar un tiro de Javier Mendoza.

En el segundo capítulo, Gimnasia salió más decidido a buscar el partido y a los 10 minutos tuvo una oportunidad con un cabezazo de Osvaldo Barsottini, pero el palo y Champagne le impidieron marcar el primer tanto del encuentro. Luego, en el rebote, se lo perdió el delantero Pablo Vegetti.

Después el partido fue mediocre y apenas se destacaron un remate del colombiano Miguel Borja, que tapó Monetti, y un cabezazo de Alvaro Fernández que pasó muy cerca.

Sobre el final, Pouso vio la tarjeta roja cuando ya estaba en el banco de suplentes y le dio una inyección extra de nerviosismo a sus compañeros y cuerpo técnico, que terminaron criticando la actuación de Pitana.

Fuente: DyN