Los padres de Mateo desdieron que llevarán adelante a cabo acciones legales en contra de la institución, autoridades y la Dirección General de Escuelas. Consideran y detallan que desde la fecha en que ocurrió el abuso, 5 de marzo, el colegio no se responsabilizó como debería.
Los mismo señalan que no fueron notificados y que se enteraron «de casualidad», cuando un amigo les mostró el vídeo que circulaba en las redes. Cuando fueron a reclamar desde la institución remarcaron que los agresores estaban arrepentidos y que Mateo los había perdonado.
Mateo, actualmente, se encuentra bajo tratamiento psicológico y sus padres comenzaron un estudio minucioso de los vídeos, los hechos y las responsabilidades para la promoción de las denuncias correspondientes a las personas y organismos implicados que no cumplieron con los protocolos. De igual manera, detallan «Fue una emboscada programada y organizada, este grupo de chicos lo ridiculizan, lo encierran, tratan de hacerlo pelear con otro compañero y finalmente lo golpean».
«No existe ninguna especie de manipulación objetivo o enriquecimiento para nosotros de esto más que la búsqueda de la verdad y justicia, no queremos que haya otro Mateo». «Estos hechos no ocurren de casualidad, ocurren cuando se violan una serie de protocolos y normas mínimas de control de convivencia estudiantil. Hemos intimado a las autoridades del colegio a que promuevan la denuncia penal por acoso y violencia Ley nacional 26.485, y lesiones psicofísicas a mateo, sin tener al día de la fecha respuesta alguna» finalizó la familia.