Es por el crimen de la uruguayense, Alejandra Inchauspe, ocurrido el 27 de febrero de 2012. Durante la tarde de este martes se llevó a cabo la lectura de los alegatos en el juicio que se lleva adelante contra el psiquiatra Hugo Leimann Patt. El fiscal Larroca solicitó que el imputado sea condenado por el tribunal a prisión perpetua por el homicidio calificado por el vínculo y alevosía. La Defensora dijo
que Leimann Patt no ha podido refutar los dichos de los testigos y aseveró no encontrar «peor situación procesal» para desarrollar el juicio. La sentencia se conocerá la semana próxima. La fiscalía y la defensa dieron por clausurada la etapa probatoria y desistieron así de los últimos testigos que estaban planificados por declarar, ante el tribunal encabezado por la jueza Carolina López Bernis y los vocales Martín Carbonell y Silvina Gallo. Así Larocca hizo la lectura de su alegato y subrayó que Alejandra Inchauspe fue la víctima que falleció el 27 de febrero de 2012 en Chajarí «entre las 21.30 y 22 horas, a raíz de más de 20 puñaladas, en la vivienda que compartía con Leimann Patt».
Así mismo dijo que los peritos «confirmaron que estaba hartamente comprobada su capacidad de entendimiento» y reiteró el informe del médico forense que detalló las heridas encontradas en el cuerpo de la víctima. A su vez alegó que Inchauspe había dado aviso de tener miedo contra su marido en una charla que habría mantenido días previos con quien fuera su empleada doméstica. La hipótesis del fiscal fue que luego de matar a su mujer, Leimann Patt «se sacó la ropa, se lavó como pudo y sacó plata para ir hasta lo de la niñera a avisarle que se iba por 15 días» y mencionó que los gritos «desgarradores al momento del crimen hicieron que los vecinos dieran aviso a la policía». En ese contexto y acorralado por los uniformados «decide pegarse un tiro en la sien del lado derecho, mientras su mujer yacía muerta en el living de su casa», argumentó. Larroca descartó completamente la participación de un tercero en el crimen. La autocrítica en el proceso de investigación fue por la falta de un dermotest en el psiquiatra, que según el propio fiscal correspondió a una «equivocación propia y de la defensa, que no pidió que se produzca esa prueba» y confesó que la misma podría haber sido de importancia, sobre todo para esta nueva defensora.
En ese marco puntualizó que existieron antecedentes de violencia entre ambos protagonistas de la pareja y calificó como «un caso típico de violencia de género», entendiendo que Inchauspe era víctima del síndrome de Stocolmo, «donde era sometida y el la manipulaba. Utilizaba como herramienta de seducción y manejo el ser cariñoso con los hijos». «Hay pruebas que lo acorralan aunque haya faltante de testigos directos», afirmó Larroca, para luego considerar que Leimann Patt fue el artífice de una «simulación de una incapacidad en la Investigación Penal Preparatoria. Ha mentido. Sobre simuló una incapacidad que no tenía» y pidió que ese aspecto sea tenido en cuenta por el tribunal. Por su parte, la defensora Luján Giorgio subrayó la «indefensión a la que se vio expuesto el psiquiatra» y criticó la actuación del abogado Iván Dri, quien estuviera al frente de la defensa. «No se vislumbró estrategia de fondo» dijo y fustigó el acuerdo de partes al que se llegó antes de iniciar el juicio. «Es un juicio desmoralizante el que he recibido. El imputado no puede refutar a los testigos y no encuentro así una peor posición procesal», aseveró para luego desbaratar la calificante por alevosía y anticipó que sus fuerzas estarán puestas en que lo definido por el tribunal «sea revisado en una instancia superior».