El Cervecero, que había caído en todos sus partidos, venció como local 1-0 a Tigre con un golazo de Romero. Los de Caruso siguen en zona de descenso. 
Quilmes le ganó 1-0 a Tigre en el estadio Centenario y quebró una racha de cuatro derrotas consecutivas en el Torneo Final gracias a un golazo de Sebastián Romero a los 18 minutos del primer tiempo.
Con este resultado, los dirigidos por Ricardo Caruso Lombardi tomaron un poco de aire en su lucha por la permanencia, a pesar de continuar en zona de descenso.
Se dio desde el comienzo un partido trabado, con Quilmes siendo el dominador de la pelota, pero sin claridad para llegar a posición de gol. Pero, a los 18, y después de una mala salida de Tigre, Romero tomó una pelota en tres cuartos de cancha y sacó un tremendo derechazo que se metió en el ángulo superior derecho del arquero Javier García.
A partir de entonces, Tigre se paró unos metros más adelante y Quilmes intentó contraatacar, aunque dejó muy solo al uruguayo Joaquín Boghossian, jugador que sobre el cierre de la etapa se fue lesionado, por lo que lo reemplazó Facundo Diz.
Quilmes volvió a llegar a los 39, otra vez con un tiro de Romero, que salió cerca del objetivo tras pegar en un defensor adversario.
La última chance del primer capítulo fue para Tigre y se trató de un disparo desviado de Facundo Sánchez.
En el segundo episodio, el local justificó la victoria porque manejó bien la pelota frente a un pálido Tigre que nunca le encontró la vuelta al partido.
Al minuto, Diz casi marca el segundo de cabeza, tras un desborde de Cristian Lema. Tigre movió el banco y tampoco consiguió inquietar a un seguro Quilmes que siempre estuvo firme. A los 31, Leonel Bontempo remató por izquierda entrando al área y su disparo pegó en la parte de afuera de la red, lo que fue otra chance para aumentar.
En un encuentro sin grandes chances de peligro, Quilmes acertó con una genialidad de Romero y tomó confianza para pelear por quedarse en Primera.
Fuente: DyN