Restaurando el alma de la Basílica

En una entrevista especial, el artista encargado de devolverle vida a las imágenes en los murales y la cúpula del templo de la patrona de la ciudad cuenta detalles del desafío más importante de su trayectoria.
Pequeño desafío el que le tocó afrontar a Raúl González, pintor, dibujante, escultor, escenógrafo, docente y restaurador entrerriano. Frente a él estaba la inmensa cúpula de la Basílica Inmaculada Concepción, detrás, miles de fieles que durante años esperaron una obra que ponga en valor el templo de la Patrona de la

ciudad. A él le confiaron nada más ni nada menos que devolverle vida a las pinturas que algunas vez ornamentaron la Basílica y que hace más de 60 años fueron tapadas. «Se trata de uno de los trabajos más importantes que me ha tocado realizar», contó a La Prensa Federal, Raúl González, quien desde hace tiempo está abocado «a reinstalar el alma de valiosos bienes culturales que por el paso del tiempo requieren ser restaurados», como él mismo lo define. En una charla íntima contó detalles de esta obra que hoy se luce en las paredes, murales y en la cúpula de la Basílica. Desde 2009 Raúl González se incorporó como CEO a Art Restauro S.R.L. empresa dedicada al arte y la restauración de expresiones del patrimonio cultural e histórico. Junto a Art Restauro, González trabajó en el restauro del frente de la Casa Parroquial de Aranzazú de la ciudad de Victoria, las pinturas de Augusto Juan Fusilier ubicadas en el interior de la Iglesia Nuestra Señora De Aranzazú, de la misma localidad. Cuenta González que en momentos en que realizaba un retiro espiritual el padre Jorge Almeida en Aranzazú, vio el trabajo que estaba realizando el pintor. «Sin dudas que hubo allí un momento inspirador, charlamos en ese momento, justo cuando estaba por comenzar la obra en la Basilica», asegura González. Poco tiempo después, la empresa que ejecutaba los trabajos Traza junto con el Gobierno entrerriano, convocan a Art Restauro para el proyecto cuando había diferentes propuestas en danza. «Nos convocaron para participar del proceso de la puesta en valor, desde el arte, desde la pintura en este caso y seguramente que aquel encuentro con Almeida fue fundamental».

La investigación
González tenía en su experiencia la primera obra de restauración integral de las pinturas Artísticas ubicadas en la bóveda del Teatro Municipal «3 de Febrero» de Paraná. Ese antecedente fue clave, junto con otros trabajos en iglesias de la provincia, pero en este caso el desafío era mucho más grande: «Hubo un proceso de investigación que comenzó mucho antes del inicio de los trabajos en sí; se presentaron proyectos, hubo que obtener la aprobación de los organismos nacionales porque se trata de un Monumento Histórico, hubo un arduo trabajo en la elección de los santos y en el material iconográfico, con participación de los sacerdotes locales y del obispo Lozano», recuerda González.