Saocom 1B: Lanzaron con éxito el satélite argentino


El lanzamiento del Saocom 1B ratifica que Argentina posee «un dominio de la tecnología de radares muy alta que muy pocos países poseen y pone de relieve nuestra capacidad científico tecnológica», dijo el ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación, Roberto Salvarezza, luego que el satélite fuera lanzado a bordo de un cohete Falcon 9, de la empresa Space-X, desde la base de Cabo Cañaveral en Florida, Estados Unidos.


Salvarezza habló con Télam minutos después del lanzamiento, que siguió desde su oficina en la sede del Ministerio en el barrio porteño de Palermo, y se mostró satisfecho y feliz.


En octubre de 2018 fue lanzado el Saocom 1A que, con el 1B tendrán, entre sus objetivos, medir la humedad del suelo, la aplicabilidad de sus imágenes en situaciones de emergencias como la detección de derrame de hidrocarburos en el mar y pesqueros ilegales, ubicación de cardúmenes o el seguimiento y avance de las aguas durante inundaciones.


«Este nuevo satélite forma parte del plan espacial argentino a cargo de la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (Conae). Junto al Saocom 1A es de mucha complejidad tecnológica que implica un dominio de la tecnología de radares muy alta, que muy pocos países poseen, y pone de relieve nuestra capacidad científico tecnológica», explicó Salvarezza a Télam.


El ministro consideró que «este satélite es líder en el mundo y fue desarrollado por empresas como el Invap (diseñó la plataforma electrónica del radar) y Veng (servicios de ingeniería en sistemas) junto a otras 80 empresas e instituciones y más de 900 personas que trabajaron en un proyecto también con la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNAE), desarrolló los paneles solares, y la Universidad Nacional de La Plata, que diseño la malla de protección».


Como un producto derivado de la puesta en órbita del Saocom 1B, y el ya en órbita Saocom 1A, se podrá comercializar sus imágenes a nivel internacional para los países que lo requieran.


«Estas imágenes proveerán datos de mapas de agua, suelos o riego de valor muy útil para nuestros agricultores y los países que las requieran», dijo Salvarezza, quien agregó que apareció «una veta para ofrecerlas al mundo» y generar nuevos recursos.